Muchos emprendedores y empresas ya formadas, encuentran en las redes sociales el medio para generar audiencia e impulsar su marca y productos. Es así que, tanto si se trata de una empresa pequeña, una pyme, o una gran compañía, estas herramientas digitales son una pieza esencial de una estrategia de marketing empresarial.
Es fundamental para todos aportar un valor de verdad, porque aunque no existen recetas mágicas, generar un valor real a la audiencia es clave, haciendo sentir especial al cliente o potencial cliente.
Por ello brindamos en este artículo algunas claves y recomendaciones para poner en marcha un plan de redes de manera rápida y sencilla. Más allá que luego se podrá necesitar de algún asesoramiento extra si lo que se quiere es lograr objetivos concretos de crecimiento.
1. Identificar a la audiencia
Lo primero es hacer foco en el público al que se quiere llegar con el contenido, ya que son los potenciales clientes. En este ítem se debe ser lo más específico posible.
Se puede empezar respondiendo las siguientes preguntas: ¿Quién es el cliente típico al que pretendo alcanzar? ¿Qué edad tiene? ¿Son en su mayoría hombres o mujeres? ¿Cuál es su nivel de ingresos y educación? ¿Cuáles son sus intereses? ¿Qué beneficios o solución de problemas espera? ¿Se los puede ubicar en determinada ciudad, región o zona?
Las respuestas a estas preguntas, ayudará a construir el perfil de la audiencia a alcanzar, a través de una buena “segmentación” del público.
2. Definir los objetivos
Una vez que se logra identificar el público, habrá que definir objetivos para esa audiencia.
Cada publicación debe tener un objetivo. No se trata de postear porque sí, sino de hacerlo con un propósito de comunicación claro. Obviamente las ventas son el objetivo principal, pero para lograrlo pueden existir otros objetivos creativos para las redes sociales como construír el reconocimiento de su marca, fidelizar clientes, desarrollar relaciones cercanas con los mismos, acercarse a clientes potenciales o brindar soporte de servicio.
3. Elegir la plataforma adecuada para el negocio
Hoy en día existen una cantidad importante de redes sociales y plataformas, debiendo buscar y elegir las más adecuadas según el tipo de audiencia, el propio emprendimiento y los objetivos planteados.
Lo ideal es estar presente en las más populares, y es posible también en alguna plataforma especializada.
Lo primero es determinar qué red o redes utiliza nuestra audiencia: si se trata de un público entre 30 y 60 años con un perfil más profesional seguramente la red sea LinkedIn; si en cambio tiene entre 17 y 25 años, entonces serán Snapchat o Instagram. Precisamente Instagram se basa en las fotos y, como resultado, funciona muy bien para negocios basados en elementos visuales, como arte, comida, venta minorista y belleza.
Si tiene más de 40 y está en un momento de esparcimiento, utilizará Facebook, ideal para contactos sociales con viejos amigos y referentes.
YouTube se convirtió en una de las mayores plataformas de motores de búsqueda y muchas de estas búsquedas son de videos de procedimientos o en los que se explica cómo hacer algo (o “Tutoriales”). Las empresas de servicios pueden ofrecer este tipo de contenidos en esta plataforma, pero también firmas de muchos otros rubros de productos tangibles.
Posicionarse en el lugar del saber siempre suele ser una buena estrategia porque casi todas las personas quieren aprender a hacer algo, y nada mejor que nuestra marca sea una referencia para consultar.
4. Crear contenido de valor
Es muy sencillo sacar una foto y hacer videos de un producto, pero a las personas les llama más la atención encontrar una publicación que les aporte algo, que sientan que obtienen valor informativo importante o una gratificación, aunque sea pasajera. Pueden ser descripciones breves con imágenes, videos, infografías, “links” a blogs, ebooks, podcasts, presencia de “influencers” que usen o consuman la marca, etc.
Por ejemplo en el caso de videos cortos, para cierto tipo de productos vinculados a lo lúdico y entretenimiento, es posible utilizar la red social «TikTok», como “Kwai” (similar). Algunas recomendaciones para el contenido visual son:
* Describir 5 beneficios del producto que se está ofreciendo, vinculados a las necesidades de los posibles compradores.
* Compartir algún logro.
* Revelar cuál fue el antes y el después de la marca.
* Relatar una anécdota emprendedora.
* Crear un stop motion del producto (conseguir que los objetos inanimados cobren vida).
5. Conectar con la audiencia
Con las redes sociales construímos relaciones y ampliamos la lealtad de los clientes, creando un vínculo invalorable con la marca. Por eso es tan importante desde la promesa de valor en los contenidos, la descripción que acompaña a la imagen, hasta el posteo o publicación como tal.
De esta manera se va a lograr humanizar el proyecto y demostrar qué es lo que lo diferencia de sus competidores.
Actuar como si la marca fuera una persona confiable, desde los colores a las preguntas y respuestas que formulamos, es parte de una buena estrategia de interacción en las RRSS para generar confianza y conversaciones con la audiencia.
6. Organizar concursos y descuentos
Una forma eficaz de dar a conocer la pyme o emprendimiento y sus productos es a través de los concursos. Estas actividades están muy de moda principalmente en Instagram y permiten que, con cierta cantidad de productos o servicios que vayan a regalar, lo conozcan otras personas que puedan estar interesadas en lo que ofrece su marca.
Es adecuado a una variedad de negocios, y un método que es una buena forma de generar ventas, mientras que se promocionan los productos y se encuentran clientes potenciales.
7. Contenido generado por el usuario
El contenido generado por los usuarios seguirá siendo una tendencia importante, ya que las marcas buscan construir confianza y autenticidad. Pueden animar a los usuarios a compartir sus experiencias o crear contenido relacionado con sus productos, lo que promueve el compromiso y la lealtad de la audiencia.
8. Monitorear el desempeño en las redes
A medida que se vaya implementando la estrategia de redes, es importante realizar un seguimiento de lo que funciona y lo que no.
En este sentido, será fundamental medir las métricas de las publicaciones realizadas, para saber qué contenido prefieren los seguidores de la cuenta, tanto para conocer las mejores horas para publicar como los aspectos a mejorar en las próximas publicaciones.